Las técnicas de estudio nos hacen más fácil aprender la materia que forma parte de un curso, un máster o todo un ciclo formativo.
Con métodos de estudio eficaces, podemos mejorar nuestra velocidad de memorización, además de obtener una mayor comprensión del temario, algo que también nos servirá cuando tengamos que aplicarlo de forma práctica, por ejemplo a la hora de trabajar.
Se ha investigado profundamente sobre cuáles son las mejores técnicas de estudio, llegando incluso a formularse algunas técnicas que para muchos estudiantes han sido el secreto de su éxito. Aquí podrás descubrir qué son las técnicas de estudio, cuáles son los mejores métodos de estudio eficaces y a aprender a estudiar con los que mejor se adapten a tus preferencias.
A continuación tienes algunas técnicas para el estudio, con las que mejorar en diferentes estrategias de aprendizaje:
El método Cornell es una técnica para tomar apuntes, con la que te será más productiva tu atención en clase.
En primer lugar, requiere máxima concentración para escuchar todo lo que están impartiendo durante la clase.
A continuación, debes clasificar la información en los distintos apartados en los que se divida el papel, según la naturaleza de los datos a escribir.
Algunos estudiantes preparan plantillas previamente, con espacios en los que deben incluir título, notas de clase, ideas clave y resumen.
Cada estudiante tiene sus métodos para estudiar mejor, por lo que te presentamos a continuación los mejores métodos de estudio a nivel general, para que aproveches los que más se adapten a tu estilo de aprendizaje:
Añade a tus hábitos de estudio la creación de apuntes personales. Al escribirlos por tu cuenta y con tus palabras, es más fácil que se queden en tu memoria para siempre.
Anota las ideas más importantes para ti. Al tomar notas sabrás priorizar desde el primer instante los conceptos a los que debes prestar más dedicación.
La técnica de subrayado sirve para comprender la información, pero también a la hora de memorizar, ya que visualmente te ayuda a descartar datos o ideas que no son necesarios en ese estudio.
En las técnicas de estudio para memorizar, la asociación de imágenes es uno de los mejores métodos de estudio que puedes aprovechar y con el que más fácilmente se te quedarán las ideas que debes aprender.
La repetición de acciones provoca una mayor consolidación de ideas memorizadas en el cerebro. Con la reiteración escrita en forma de resumen, tendrás una idea global de todo lo estudiado.
El estudio en voz alta permite una mayor asociación de ideas, dado que representa una exposición, como si tuvieras un público delante. Útil tanto en exámenes orales como para aprender la argumentación de conceptos.
Las reglas mnemotécnicas vinculan ideas o conceptos a elementos que te ayudan a recordarlos. Pueden ser desde imágenes hasta palabras en concreto o incluso canciones. Así relacionas algo que te puede gustar o que recordarás fácilmente, con la información que debes aprender.
En los métodos de estudio eficaces los colores siempre están presentes. El motivo es que cada color permite asociar ideas, conceptos o incluso bloques de conocimiento, algo que luego es más fácil de recordar en un examen.
Las tarjetas para estudiar sirven tanto cuando las escribes (memorización) como cuando las repasas (aprendizaje) y te ayudan a identificar los conceptos más importantes.
Adelántate al examen y utiliza preguntas que consideras apropiadas para la materia que estudias. De esta forma también puedes identificar mejor qué es lo más relevante y preparar argumentaciones con tus respuestas.
Con una buena disciplina puedes adquirir hábitos de estudio, que puedes añadir más fácilmente a tu rutina diaria, sin que suponga un esfuerzo extra.
La concentración para estudiar es clave si quieres que el tiempo invertido sea rentable. Crea un espacio que fomente el estudio, aprende técnicas para concentrarse y notarás de inmediato los resultados.
Un calendario de estudio (con horario vinculado) te ayuda a organizar los tiempos dedicados a tu formación, al mismo tiempo que te permite establecer otras horas dedicadas al ocio, al descanso y a otras actividades.
El estudio de materias diferentes intercaladas ayuda a la organización de ideas y a la estructuración de conceptos. Cuanto más distintas sean las materias a estudiar mejor, para evitar también errores de asociación.
El método Feynman es una técnica de estudio con la que mejorar el aprendizaje de la materia que tengas que desarrollar en un examen.
Esta técnica se basa en escoger un concepto a estudiar, desarrollar el tema de forma escrita y luego oral.
A continuación debes completar información que hayas visto que te ha faltado y volver a explicar el tema, ahora de forma más sencilla casi como si hablaras con un niño.
Así desarrollas una argumentación de compleja a sencilla, que es más fácil que se mantenga en tu memoria, no solamente como idea, sino también en la forma de explicarla.
El método de estudio Pomodoro es una técnica de organización del estudio. Consiste en dividir el estudio entre períodos de atención y descansos, algo similar a un mapa con picos y valles de aprendizaje.
Con la técnica Pomodoro puedes acostumbrarte a exigir a tu cerebro un mayor esfuerzo en momentos puntuales, seguido de espacios de descanso, con los que recuperarse, tal y como se tratase del entrenamiento de un músculo.
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