Máster en Abogacía Plazas limitadas

En primer lugar, antes de hacer tu máster de abogacía tienes que contar con el Grado de Derecho, que normalmente se desarrolla durante 4 años.

Con el graduado en derecho y el máster realizado, todavía hay que cumplir unos requisitos para ejercer profesionalmente. Entre ellos, el de superar unas prácticas externas tuteladas y aprobar también el Examen de Acceso a la Abogacía.

Con todo aprobado (título universitario, máster realizado y pruebas superadas), así como en base a tus propias habilidades profesionales, podrás optar a una amplia variedad de empleos relacionados. Estos son algunos de los más importantes:

• Abogado de empresa.

• Abogado y jurista en Despacho de Abogados.

• Asesoría y consultoría jurídica en Derecho Procesal.

• Formación de empleados públicos, jueces, fiscales, letrados de la administración de justicia y operadores jurídicos.

• Formación de funcionarios públicos de la administración de justicia: gestores, tramitadores y auxiliares judiciales.

• Gestión de despachos de abogados.

El calendario académico en esta formación corresponde a 3 semestres, que se pueden impartir en uno o dos años, según la programación de cada centro.

En cualquier caso, el reconocimiento en créditos es de 90 ECTS, siendo 60 créditos correspondientes a formación y otros 30 a pasantía jurídica de 6 meses en despachos de abogados.

Consulta la ficha de cada máster para confirmar que el temario se ajusta a tus perspectivas profesionales. Algunos de los temas más recurrentes son los siguientes:

• Asesoría jurídica.

• Derecho penal procesal.

• Asesoría laboral.

• Resolución de casos prácticos.

• Información básica sobre protección de datos.

• Fundamentación y argumentación jurídica.

• Derecho notarial.

• Procedimientos registrales.

• Asesoría y litigación administrativa.

• Asesoría de derecho administrativo.

Al temario planteado en el calendario académico, por lo general se incluye en cada máster el desarrollo de unas prácticas externas tuteladas, con las que adquirirás una experiencia práctica óptima que también ayudará a tu currículum.

Con esta formación contarás con la base teórica necesaria para el desempeño del trabajo, así como también con experiencia práctica de resolución de conflictos y funciones ligadas a la abogacía, con las que podrás ampliar tus objetivos profesionales hacia la especialización que tú quieras.

Tras un máster en abogacía puedes complementar tu formación con otros másteres, como estos que te recomendamos a continuación y que están estrechamente relacionados con el sector:

• Máster en Protección de Datos.

• Máster en Derecho Digital y Nuevas Tecnologías.

• Máster en Asesoría Fiscal.

• Máster en Derecho Laboral.

• Máster en Derecho Mercantil.